Una vez comenzado este nuevo año, se me ha incrustado en la cabeza la fecha del 8 de Marzo. Parece que todavía queda mucho, pero son sólo 43 días de nada. A la velocidad que va mi vida en estos momentos, 43 días no son mucho tiempo.
Esta fatídica fecha, es la del fin de mi contrato en la empresa en la que trabajo y en la que creo que por fin he encontrado mi sitio.
Lo he dado TODO en esta empresa. He sido durante 7 meses víctima de mobbing, he metido horas como nunca, he asumido más responsabilidades de las que me correspondían, me he llevado trabajo a casa, he dejado mis clases de francés.....
Pero a pesar de toda mi dedicación, creo que no tengo nada seguro, creo que cualquier cosa puede pasar. Se me ha metido el miedo en el cuerpo de que mi contrato no va a ser renovado y me paso el día obsesionándome con los signos que me dicen que no voy a seguir.
Hace muchos años que no estaba tan a gusto en ningún sitio. Necesito quedarme. En este momento no estoy preparada para una negativa. Me quedan 43 días de sufrimiento ascendente.
Siento haberos escrito algo tan oscuro. Hace tiempo que os prometí sólo risas, pero no puedo alejar el miedo de mi cabeza.
VEINTIUNO DE ABRIL
Hace 2 semanas
Te entiendo, ese miedo viene causado por la mala situación en la que nos encontramos, pero no porque no seas una curranta, así que arriba ese ánimo, sé positiva porque lo positivo atrae lo positivo, intenta no pensar en esa fecha como algo malo.
ResponderEliminarEspero que ese miedo después se convierta en mucha ilusión, risas, carcajadas y alegría porque será que sigues ahí.
Un abrazo!!
Y por cierto días malos tenemos todos... es inevitable desgraciadamente, pero por suerte en tu blog abundan las buenas noticias.