viernes, 9 de abril de 2010

LONDRES III

(No es la foto del sitio, pero me lo recuerda mucho, je!)

Nuestro rinconcito
La noche que llegamos a Londres, después de nuestras tres horas de metro, encontramos el rincón que íbamos a visitar sin falta el resto de los días.

Cuando lo encontramos no parecía gran cosa, unas simple cafetería con algo de comida, un sitio pequeño, sin una decoración definida, aunque con un ramito de flores frescas en cada mesa. A pesar de no llamarnos mucho la atención, entramos, ya que necesitábamos un sitio donde cenar y ya era muy tarde para dar más vueltas.
Lo que cenamos estaba bueno, pero sin más. Eso sí, nos quedamos alucinados con las tartas y capuccinos que se estaban tomando en la mesa de al lado. Es entonces cuando encontramos la vitrina de la que habían salido esas maravillas y había muchas más. Que festival del dulce!
Por ejemplo: Tarta de chocolate con cerezas, mousse de naranja, tarta de manzana, tarta de queso con fresas, tarta de queso con chocolate, tarta de tiramisú........ Además de esto, unos crepes que ni en la mismísima Francia, uf!

A partir de ese día, cuando ya no nos quedaba aliento y nuestros pies se arrastraban por el dolor, cogíamos un metro para llegar a nuestro rinconcito de placer. Sustituímos nuestras cenas, por unas meriendas de lo más goloso.

Cuando terminábamos nuestra merienda, nos animábamos un poco y hacíamos planes sobre lo que ver al día siguiente.

1 comentario:

  1. Pero esos postres son PECADO!!!!!!

    Que cosa más ricaaaaaaa!!!!!

    No sabía yo que Londres tuviera unos postres y unos capuchinos tan buenos...

    Se me cae la baba con el de tarta de queso y fresa... yo ahí no podría entrar, ¡¡¡me pondría mala...!!!

    Porqué será que me gusta taaaaanto el dulce... (no puedo ser más golosa...)

    Seguro que intentaría probar cada día un postre distinto, y ese crep que describes... ¡uhhhmmmm! que ricuraaa ja ja

    Chica que entrada más dulce has hecho... ¡me ha encantado!

    ¡¡¡Un abrazo fuerte!!!

    ResponderEliminar